Palabras Para Recordar

No Necesitas Entrenamiento Juan 9:1-41   Quizás una de las razones principales por la cual muchos de los cristianos no comparten su Fe o sus experiencias es porque se siente que no están calificados para hacerlo. Pero en realidad no necesitas ningún tipo de entrenamiento para hablarles a otro de tu fe y acerca de tu situación, lo único que realmente necesitas es haber aceptado al Señor como tu Salvador. Esa es la calificación que necesitas. En este pasaje vemos a un hombre ciego de nacimiento el cuál Jesús le dio la vista, después que Jesús sano a este hombre vinieron ciertos religiosos conocidos como los fariseos y le hicieron preguntas bastante complejas sobre Jesús, las cuales el hombre dio una respuesta bastante clásica, “esto es lo que se, estaba ciego y ahora puedo ver”. En muchos sentidos, nosotros como creyente estábamos como este hombre ciego, nosotros también estuvimos alguna vez cegado por el engaño del pecado, satanás se ha encargado de cegar el entendimiento de

El Perdón No Es Selectivo. Mateo 5:43-48   Como expresó un comentarista bíblico; “devolver mal por bien, es malo, devolver bien por bien es humano, devolver bien por mal es divino”. Nosotros no somos perfectos, pero sí seguimos a un Dios perfecto que quiere que nosotros no solo perdonemos a nuestros enemigos, sino también que los amemos. Amar a nuestros enemigos es algo que ciertamente no resulta nada fácil, ni mucho menos natural, si esperamos que ese amor llegue repentinamente, simplemente no sucederá. Anímese a orar por sus enemigos y pídale la ayuda al Espíritu Santo para que lo ayude en el área del perdón. La Biblia está llena de ejemplos de esa capacidad divina de perdonar que solo puede venir de la obra del Espíritu Santo en nuestras vidas. ·        El Espíritu de Dios le permitió a Abraham darle la mejor tierra a su compañero de viaje y sobrino Lot. ·        El Espíritu de Dios le da a José la capacidad de abrazar y besar a sus hermanos que lo habían vendido com

  Confiar En Dios Proverbios 3:5-8 “Fíate en Jehová de todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propia prudencia” v.6 “Reconócelo en todos tus caminos, y el enderezara tus veredas” v.7 “No seas sabio en tu propia opinión; Teme a Jehová, Y apártate del mal;” v.8 “Porque será medicina para tu cuerpo, Y refrigerio para tus huesos”.   Una de las cosas más difíciles de hacer como ser humano es confiar algo importante a otra persona, lo queremos hacer todo por nuestra propia cuenta. Entonces tomas la decisión mas importante de tu vida de aceptar al Señor como tu Salvador, y casi todas las personas comienzan a decirte que confíes en Dios para todo, y si es muy cierto, pero...  ¿Como lo haces? ¿Como das esa confianza? ¿Como esperas? Aquí unos puntos para ayudar. ·        Cuando ores pide siempre que se haga la voluntad de Dios  y no la tuya en tu vida. ·        Busca a Dios antes de  tomar alguna decisión, no después. ·        Pase mas tiempo en la Palabra de Dios. ·

    Necesitamos Reconocer Nuestra Condición Mateo 5:3-5   Aquí en estos versículos Jesús nos muestra el camino a la verdadera felicidad. Y aunque no lo crea, esto no tiene nada que ver con nuestra realización personal. La palabra bienaventurados se refiere al bienestar de los que, debido a su relación con Dios reciben el reino que incluye Su amor, cuidado y Salvación. Los de corazón humilde son los que se postran delante de la presencia de Dios y se someten a Él. ¿Como podemos reconocernos? 1.    Mírate como realmente eres : Si, cuando realmente te das cuentas de tu necesidad de Dios, te ves real, y así reconoces que eres un pecador que necesitas diariamente de Dios, porque no puedes hacer nada solo. Saber que Dios ya está en el día de mañana me da la tranquilidad de saber que todo estará bien. 2.    Actúe : Estos nos lleva a comenzar hacer cambios en nuestras vidas. Hay veces que Dios nos permite tener un poco de tristeza en nuestras vidas, pero es para que nos ace

       Orar Regularmente   Salmos 55:16-17 V.16 “En cuanto a mí, a Dios clamaré, Y Jehová me salvará”. V.17 “Tarde y mañana y a mediodía oraré y clamaré, Y él oirá mi voz”.   La oración muchas veces parece ser una obligación. Algunos solo lo hacen cuando necesitan algo o solo en un momento difícil en sus vidas. La oración debe de convertirse en algo natural como respirar. Una vez que abrimos nuestro corazón a Jesús la oración se convierte en algo que te llena de gozo. La oración es una oportunidad que tenemos para tener una conversación con nuestro Creador, y cuanto más oramos más estrecha y profunda es nuestra relación con Él. La oración transforma tu vida de tal manera que tus problemas ya no los vez igual. En mi opinión la oración debe ser una práctica constante de devoción y no una súplica ocasional de necesidad.   Salmos 55:16-17 V.16 “En cuanto a mí, a Dios clamaré, Y Jehová me salvará”. V.17 “Tarde y mañana y a mediodía oraré y clamaré, Y él oirá mi voz”.   La oració